From lost to the river

1.EXT.CARRETERA DE CARMONA-DÍA

 

Sr Wood, Srta Stone y Ardillita en un patinete.

SRTA STONE

No sé con qué armas se peleará la tercera guerra mundial pero la cuarta será con palos y piedras.

SR WOOD

Me encanta la arbitrariedad de sus vetas, Srta Stone, ¿se ha pulido hace poco?

(TIEMPO)

(Potencialmente se estampan contra

la luna de un coche)

 

2.INT.ANTIGUO DON TICO-NOCHE

Ardillita mueve una bolita con su cola mientras olisquea el polvito blanco de la mesa.

 

ARDILLITA

 🍑🍑🍆🍩💣🚷🍩🍩🍆🍆🍆🤸‍♀️💦 🍑💦🔥

SRTA STONE

Ah! F = m · a , la bolita caerá en 2m/s².

(Suspirando)-Es tan lista, ojalá comprendiéramos su lenguaje, nos queda tanto por aprender de ella…

(TIEMPO)

(Potencialmente la bolita rompe el cristal)

SR WOOD

Uno de nosotros ha conseguido ya tener pelito. ¿Quizás si nos frotamos?

SRTA STONE

El roce hace el cariño, Sr Wood, no estimula la consciencia.

 

Seguramente, Pablo Castañeda no estaría de acuerdo con la Srta. Stone, ya que su pintura estimula nuestra consciencia a costa de roce, no sólo por la ingeniosidad de la imagen, sino por el despertar táctil que cada uno de los elementos representados nos provoca. Podemos intuir el placer que ha sentido Pablo al imaginar la superficie del mármol o la aspereza de la madera, y resolverla con virtuosismo. Pero eso no haría diferente esta exposición de la de cualquier otro buen pintor. Pablo, además, porta un discurso mediante su pintura, abriéndola a múltiples narraciones que implican directamente al espectador. Quizás no todos sepan que, antes de estudiar Bellas Artes, Castañeda estudió en Ciencias Políticas; y la Historia nos demuestra cómo es mejor en este orden que al contrario.

Es el anhelo de la pintura afectar a nuestra mirada y al pensamiento desde su presencia corpórea, y esta cualidad, que aún la diferencia de cualquier simulacro virtual, es también la nuestra respecto a cualquier inteligencia artificial. De estas cuestiones, y sobre lo que ocurre en nuestra cabeza cuando vemos una pintura, trata la tesis que prepara Castañeda en la Universidad de Sevilla.

En From lost to the river, De perdíos al río (esta la canto en andalú), está implícito que nos mojemos y que nos dejemos llevar. Las obras de esta exposición no tienen nada de inocentes, ya han cometido el crimen en Plan de escape (2023). ¿Es el crimen la evaporación de la Figura? Esta es la primera vez que, en una exposición de Pablo, la figura humana ha desaparecido por completo, sólo queda un rostro distorsionado de una idea de Madonna en un poster. Incluso la mayor parte de objetos industriales o manufacturados parecen haber pasado a un segundo plano, tras la supremacía de los ensamblajes de materiales más elementales: la madera y la piedra, así como la forma más sencilla, la de la pequeña esfera.

En este universo sólo una ardillita sobrevive; sin embargo, todo está animado. La maestría de Pablo en esta exposición reside en sugerir texturas y títulos para que nosotros como espectadores hagamos el resto. Bajo nuestra i-responsabilidad creativa, la de nuestros deseos y pulsiones, de nuevo los más básicos, los de devorar un donut o los de meter un palito, se resuelve la primera incógnita del crimen pictórico: ¿dónde está el cuerpo?

Carmen Ayala Marín